En temas de diseño, las ideas y los conceptos siempre serán lo más valioso, sin embargo, éstos serán solo ilusiones si no se trabajan y se hacen realidad. Para llevar a cabo este trabajo se cuenta con una diversidad de herramientas que ayudarán al diseñador en las diferentes etapas del proceso. El software de diseño es, sin duda, una herramienta esencial en nuestra época.
Los programas y aplicaciones tienen la función (a través de una computadora) de facilitar el trabajo al usuario y ahorrarle tiempo. Recientemente, y en conjunto con la evolución informática, es posible diseñar cosas que de manera análoga sería muy complicado concebir, es decir, que no solo facilitan el trabajo, sino que también potencializan las posibilidades humanas.
En los inicios las interfaces y los comandos requeridos para hacer funcionar los programas eran complejos, los usuarios debían ser expertos, pero con los avances y sus nuevos diseños la operación simplificó, dando lugar a la democratización de estos softwares, hablando de usabilidad. Actualmente pensar en un proyecto de diseño que no haya pasado en alguna de sus etapas por un programa informático resulta inimaginable.
Existen diversas aplicaciones y programas que ayudan al diseñador a crear mapas mentales, lluvias de ideas, bocetos, modelos conceptuales, presentaciones, visualizaciones, proyectos ejecutivos e, incluso, a generar la información digital necesaria para materializar y fabricar mediante alguna máquina, según sea el caso del proyecto.
Además de los ordenadores de escritorio que eran el hardware principal, recientemente se suman a este grupo, las tabletas y los smartphones con sus respectivas aplicaciones, con las cuales ahora también se pueden resolver muchas de las tareas del diseño.
Respecto a lo anterior la pregunta es, ¿cómo serán estos programas informáticos en un futuro próximo? Siempre habrá un grado de incertidumbre y solo queda especular, pero lo cierto es que viendo la curva evolutiva de la informática y de los programas en cuestión hay una serie de aseveraciones que merece la pena mencionar.
- Paradigma del lápiz y papel
Para muchos creativos las ideas y conceptos deben plasmarse con lápiz y papel, de forma análoga, la manera más intuitiva de aterrizar conceptos sin que el dominio de las herramientas sea un obstáculo o marque una dirección. Este argumento tiene sentido cuando el programa usado no está diseñado para esta tarea, sin embargo, las tabletas con sus respectivas apps tienen ahora una interfaz tan intuitiva que simula el trazo natural del lápiz sobre el papel. Analizándolo bien, el lápiz y el papel son herramientas que aprendimos a usar desde pequeños y por eso nos son particularmente familiares, pero para las generaciones futuras, indudablemente, será diferente.
- Interfaces
El diseño de interfaces conecta al usuario con el ordenador, una buena interfaz implica poco conocimiento y un rápido dominio del programa o el dispositivo en cuestión. Los nuevos programas son cada vez más sencillos de usar y lo que en algún momento implicaba años de estudio para poder dominar una herramienta ahora se puede entender y controlar en unas cuantas horas. Esto implica que poco a poco los diseñadores ya no estén limitados por sus conocimientos técnicos y puedan dedicar más tiempo en procesos creativos.
- Displays touch
Hasta ahora la mayoría de los programas son controlados mediante mouse o trackpads, sin embargo, los displays touch, como un input informático, son un método muy intuitivo que será prioritario en el diseño de interfaces y experiencias de uso.
- Mediante voz
Cada vez existen más smart speakers en los hogares, esos que reciben instrucciones por voz y las ejecutan. Pensar en un software de diseño o CAD controlado por voz no sería una idea descabellada.
- Maker movement y democratización CNC
De la mano del punto 2, no solo los programas son ahora más intuitivos, también las máquinas y productos se convierten en algo controlable por la persona promedio, basta con mencionar el caso de la impresión 3D. Adicionalmente, el movimiento maker invita a las personas a aprender sobre temas de física, materiales, electrónica y mecánica para poder materializar las cosas que imaginan. Esta tendencia seguirá extendiéndose y acercando las herramientas de fabricación a las disciplinas creativas.
- Renders y RV
Hoy en día resulta casi imposible distinguir una foto de un buen render, los recorridos de realidad virtual, por su parte, pueden ayudarnos a experimentar un proyecto arquitectónico como si lo estuviéramos viviendo, aún en etapas tempranas del proyecto. Este tipo de herramientas seguirán extendiéndose y muy probablemente surgirán nuevas formas de explorar y experimentar diseños que aún disten de existir en la realidad.
- Parametrización
Dentro del campo del diseño, este término se refiere a definir variables que interactúan entre sí para generar una construcción geométrica, cuando se cambian estas variables la construcción sigue funcionando, pero con diferentes resultados. Seguramente los diseñadores están familiarizados con el término “diseño paramétrico”. Dicho de otra forma, la parametrización en el diseño consiste en programar la geometría de objetos, pudiéndose aplicar desde un logotipo, hasta una mesa o un edificio.
Este trabajo implica no solamente una función creativa, también ubica al diseñador como un programador de objetos, implica por lo tanto conocimiento de lógica y programación, muy cercano también al campo de la inteligencia artificial.
La parametrización, aunque implica un trabajo intenso en primera instancia, en ciertos proyectos y pensando a largo plazo puede ahorrar una cantidad de trabajo impresionante.
- El día que los ordenadores diseñen
Quizá el más grande de los paradigmas de la inteligencia artificial es si las máquinas podrán ser capaces de crear y no solamente de ejecutar. Tal vez llegue el día en el que puedas indicarle a una máquina las características de un espacio y ésta sea capaz de diseñar una casa que cumpla con todos los requerimientos del proyecto.
Usando las herramientas del futuro
Oru Kayak es una empresa de diseño de kayaks, emplea herramientas digitales y tecnológicas como el software de autodesk fusion 360 para materializar sus proyectos.
Se piensa que el diseño como actividad creativa será de los últimos oficios en desaparecer ya que se necesita un inmenso desarrollo en la inteligencia artificial para que una computadora pueda resolver problemas de formas creativas, o lo que es lo mismo crear ideas y conceptos de diseño. Mientras ese día no llegue los programas seguirán siendo herramientas cada vez más eficientes que ayudarán a los diseñadores a convertir sus ideas en realidad.