Estas dos amigas sevillanas afincandas en Madrid, Mercedes Peralta y Mercedes Valdenebro, forman equipo en Las 2 Mercedes, un estudio de arquitectura de interiores y decoración que en apenas unos pocos años (lo fundaron en 2012) ya marca el ritmo y el futuro del interiorismo en España y entre las nuevas generaciones. La “frescura delicada” es su estilo, encontrando en cada uno de sus proyectos la combinación de espacios neutros y limpios con elementos más traviesos y arriesgados en cuanto a colores y texturas se refiere. Una apuesta siempre por los buenos materiales en los acabados y piezas de mobiliario con un punto de diseño y arte contemporáneo. “Todos nuestros proyectos coinciden en la mezcla, en el hermanamiento de piezas, estilos y épocas”, afirman.
La perseverancia y el trabajo a conciencia son su lema para llegar donde están, buscando crear siempre proyectos con un gusto exquisito, calidez y una identidad única. Entre las dos, tienen la suerte de entenderse a la perfección en el trabajo, cuya simbiosis aporta a todos sus diseños un aura de refinamiento y calidez.
Mercedes Peralta estudió Interiorismo en Madrid y en la Escuela Parsons de Nueva York, y Mercedes Valdenegro Derecho, aunque antes de la fusión ejercía como fotógrafa. Entre los proyectos de su currículum destacan los hoteles One Shot de Madrid y Barcelona, el Sleep’n de Atocha (tambien en Madrid), el restaurante Oriza de Sevilla, los restaurantes Midtown y Flores de Alcachofa de Madrid o el hotel Casa de Indias en Sevilla.
Como se puede apreciar, por el momento la gran parte de sus trabajos se ha centrado en el desarrollo de hoteles, restaurantes, pero también están inmersas en viviendas particulares, y tienen mucho que contar de ahora en adelante y varios proyectos esperándolas a las puertas.
MARÍA ANTÓN: ¿Cómo es el proyecto perfecto?
LAS 2 MERCEDES: Pensamos que el proyecto perfecto no existe; cada uno de ellos es una experiencia única que disfrutamos mucho y que nos aporta distintos aprendizajes. Ahora, nos gusta cuando hay buena química con el cliente y podemos desarrollar algo en conjunto.
MA: ¿Cómo se convence a un cliente de la importancia que tiene la imagen de un local para obtener mejores resultados?
L2M: Los clientes que nos llaman tienen bien claro que la imagen del local es tremendamente importante para su negocio: nosotros le damos la forma, el material y el color a sus ideas para convertirlas en una propuesta exitosa.
MA: Tras años de trabajo, ¿ya os habéis hecho con vuestro nicho de mercado?
L2M: Nuestro trabajo hasta ahora se ha enfocado en proyectos residenciales de alta gama, hoteles y restaurantes. Si bien tenemos amplia experiencia en estos rubros, siempre estamos abiertas a cualquier tipo de colaboración. Últimamente venimos experimentando también con proyectos promocionales.
MA: ¿Qué es lo que hace que nos enamoramos de un lugar nada más verlo, o por el contario, que no sintamos nada?
L2M: Nos enamoramos de un lugar nada más verlo cuando imaginamos su potencial. Nos preguntamos entonces, ¿podemos transformarlo en aquello que nos imaginamos?, ¿podemos crear un lugar acogedor, donde la gente disfrute mucho vivir o estar?
MA: ¿Tenéis miedo a perder la inspiración?
L2M: La inspiración es difícil de perder cuando uno está muy metido en el trabajo: como en todo, obviamente, tienes momentos de frustración porque el concepto del proyecto no siempre avanza al ritmo deseado, pero con esfuerzo y dedicación se logra retomar la senda de la creatividad.
MA: ¿Qué tiene Mercedes Peralta que no tiene Mercedes Valdenebro y viceversa?
L2M: Mercedes Peralta es más soñadora y creativa, mientras que Mercedes Valdenebro es más ejecutiva y directa. Entre las dos hacemos un gran equipo porque nos complementamos; cada una aporta desde esa identidad propia.
MA: ¿Qué las une?
L2M: Nos unen, además de la sintonía profesional y personal, muchísimos años de amistad y una historia compartida desde nuestras infancias en Sevilla.
MA: ¿Qué lugar/espacio esperáis con ansia decorar?
L2M: ¡Nuestra propia casa en el campo!
MA: ¿Cuál es la antítesis de Las 2 Mercedes?
L2M: La ostentación sin sentido.
MA: ¿Cómo se educa el buen gusto?
L2M: Hay para quienes el gusto es una expresión natural de su sentido estético, para otros es una consecuencia de su sensibilidad a estímulos creativos como son el arte, el diseño, la fotografía o la arquitectura, etc.
MA: ¿Cómo se aprende a diseñar interiores?
L2M: Estudiar una carrera de diseño de interiores suele ser un buen paso; sin embargo, hace falta ser muy curioso y estar siempre atento a lo que vemos a nuestro alrededor. Hay que pensar en el uso, la función y la distribución del espacio, así como en la diversidad de texturas, colores y materiales que lo visten.
MA: ¿Cuál es la parte de un proyecto que realmente saboreáis?
L2M: A ambas nos gusta la parte inicial del diseño, cuando podemos dar rienda suelta a nuestra imaginación y sentar las bases del mismo.
MA: ¿Qué es lo que hace un diseñador de interiores y que la mayoría de la gente desconoce?
L2M: Además de diseñadores, somos como psicólogos, especialmente cuando trabajamos en proyectos de vivienda.
MA: Si tuvieráis una vida paralela al diseño o no os dedicarais a ello, ¿qué os gustaría ser?
L2M: La verdad es que estamos contentísimas que la vida nos haya llevado por donde nos ha llevado... ¡y pensar que Valdenebro tenía pensado ser abogada!
Fotografía de Daniela Muttini
*ESTE ARTÍCULO FORMA PARTE DEL VOLUMEN 01 DE LA REVISTA CONTAINER