El Museo Franz Mayer presenta el trabajo de Felix Tissot, un ceramista cuya trayectoria ejemplifica las relaciones creativas en México, el acierto en la colaboración entre el trabajo artesanal y propuestas contemporáneas de diseño.
Felix Tissot fue un ceramista francés que trabajó en la industria cinematográfica a principios del siglo XX. Posteriormente obtuvo reconocimiento por su diseño de mobiliario y cerámica en California (Estados Unidos), sin embargo, no fue hasta su llegada a México que definió su carrera como diseñador.
Después de recorrer diversos estados en el país, observando la importancia de las artesanías indígenas, se estableció en Taxco, Guerrero. Fue ahí donde observó la potencialidad del mercado turístico en la fusión del trabajo artesanal y del diseño contemporáneo. En adelante, su producción artística se caracterizó por la colaboración con artesanos de Ameyaltepec.
Fabricaba piezas de cerámica con volumetrías modernas y los artesanos nahuas pintaban las piezas con motivos tradicionales, esta cooperación originó su línea Fantasía. Esta dinámica de producción fue parte del taller Cerámica Taxco durante 40 años.
La curadora Ana Elena Mallet, en conjunto con la familia del ceramista, desarrolló la exhibición a lo largo de una década. Su nombre Lo eterno y lo moderno, enfatiza la historia de las relaciones de colaboración artística y replantea la narrativa del término “apropiación cultural”.
En México hay una larga y sana tradición de colaboración entre artistas, arquitectos, diseñadores y artesanos. Es parte de nuestra red creativa. Y este tipo de proyectos lo ponen en evidencia. -Ana Elena Mallet
Dónde: Museo Franz Mayer
Cuándo: Hasta el 16 de febrero de 2020