Del 9 al 13 de octubre, en el centro de la Ciudad de México, regresa con su séptima edición el Abierto Mexicano de Diseño. Cuatro días dedicados a descubrir nuevos talentos, propuestas y celebrar el arte de lo estético.
El AMD es un festival internacional que cada año se reúne para celebrar a la comunidad del diseño en México. Todas las disciplinas que engloban a la materia son bienvenidas, sin importar experiencia, escolaridad, nivel socioeconómico, edad o identidad y cuyo objetivo, se enfoca en la diversidad y en la presentación del diseño como una herramienta para canalizar los problemas culturales, sociales, económicos, ambientales y políticos. El evento girará entorno a exposiciones, talleres, instalaciones, conferencias y otros formatos que acerquen al público a las iniciativas de los diseñadores.
Entendemos el diseño como un factor vital en el mejoramiento de nuestra calidad de vida y una porte de valor a nivel individual y comunitario. El AMD busca concientizar acerca de este valor y visibilizar a quienes lo generan a partir de una serie de convocatorias abiertas. Se promoverá la participación conjunta y activa en un mismo espacio geográfico que será el Centro Histórico dela Ciudad de México con una multiplicidad de actores e ideas.- Ricardo Lozano, director ejecutivo.
Una de las novedades de esta edición es el Pabellón NOVEDADES, donde se presentarán las propuestas más recientes de la industria y sin distinción disciplinaria. Este espacio enfatiza las preocupaciones actuales de la industria y responde a la pregunta: ¿qué y para quién se está diseñando?
Bajo la curaduría de Mario Ballesteros, esta edición explora lo popular en la materia y todas sus contradicciones. Su foco se centra en la actualidad y la manera en la que el diseño debe de reivindicar sus bases y trasladarse hacia un camino de empoderamiento e inclusión.
En México hablamos de lo popular, que viene de pōpulus, lo del pueblo. Un diseño popular podría ser una amplificación contemporánea de lo que conocemos como arte popular, término consentido del oficialismo posrevolucionario que se utilizó para etiquetar un universo completo de producción y cultura material autóctonos que emanaba del pueblo.- Mario Ballestero.
