Detalles sutiles y terminaciones en mármol definen el diseño de interiores de este centro de bienestar ubicado en Portugal. Minimalismo en estado puro.
José Martins, Marta Machado y Marina Carbia, del despacho arquitectónico portugués Martins Architecture Office, supieron aprovechar al máximo la superficie (49 metros cuadrados) que alberga esta clínica de bienestar y centro de terapia oriental en Braga, Portugal.
El proyecto tuvo algunos limitantes, ¿cuáles? En primer lugar, el espacio. Después, el presupuesto. Y para rematar, el recinto, dentro de un centro comercial, haciendo frente a problemas de abandono. Pero parece que estos factores no fueron impedimento para poder destacar un diseño de interiores ad hoc a una clínica de estas características, donde los detalles de interiorismo son limpios y puros, a la vez de sencillos.
La recepción quizá sea uno los espacios más llamativos de este sitio. El despacho de arquitectos propone una “caja dentro de una caja”, mostrando el perímetro original e infraestructura de la clínica y dibujando un espacio escénico sin ninguna señal.
La división de las cabinas está constituida por planos flotantes que permiten que el terapeuta pueda circular libremente, creando de esta manera una atmósfera de tratamiento única. La separación entre estas cabinas y la sala de espera la marcaron con una pared de mármol y cortinas simples. Los detalles de mármol también enmarcan puertas y zoclos, lo que le da el toque perfecto y singular. Sin duda, un proyecto con propuesta que contrasta con el entorno urbano.