La luz natural es fundamental, pero a veces resulta un reto para los arquitectos conseguirla cuando el espacio es reducido o la ubicación es complicada. Se las tienen que ingeniar para brindarle vida al proyecto y al mismo tiempo adecuarse a las restricciones del lugar.
El despacho eklund_terbeek architects llevó a cabo la tarea de transformar el antiguo gimnasio de un complejo escolar (de principios del siglo XX, en Rotterdam, Países Bajos) en siete modernos departamentos, entre los que se encuentra Gym Loft, posicionado en la planta baja del edificio.
Su espacio es reducido por lo que su decoración giró en torno a esa limitante. La luz y la privacidad fueron de las partes más complicadas ya que tres lados del edificio se enfrentan al dominio público y a la preservación de un muro que dificultó la creación de nuevas ventanas. Al demoler una extensión levantada en 1970, crearon la posibilidad de un jardín dándole más dinamismo al espacio. Su acceso es por la cocina, que al mismo tiempo se mezcla con la sala y con el área característica del lugar, los ventanales en forma de arco.
Las habitaciones de los niños están en la primera planta, dentro de un conjunto que conecta el área de juegos con el baño compartido. Sobre esta zona, en el segundo piso, se encuentra el dormitorio principal.
Entre los materiales usados se puede apreciar la madera de roble en las escaleras flotantes, el piso de la recámara principal y los paneles de pared, brindando calidez al mismo tiempo que contrasta con el mármol blanco de Carrara de la isla de la cocina y el baño principal hecho de Travertino.
Despacho: eklund_terbeek architects, Rotterdam | Arquitectos: Jenny Eklund, Dominique ter Beek | Fotografía: ©René de Wit